Esa noche pasaron por ella, al llegar a la casa le dijeron que ponerse,
una tanga roja con su bra y unos zapatos de tacón, cada vez que alguien tocó la
puerta, ella salió así a recibirlos, hacia algo de frio por lo que los pezones
los tenía durísimos, los que venían en pareja solo se sorprendían de verla,
pero los singles aprovechaban para abrazarla, repegársele o agarrarle una
nalga.
Era como la 1 cuando Ana me dijo que era hora de irnos, tomamos un taxi
y llegamos a su casa, me dijo que me quedara en la cocina y que cuando subiéramos
me mostro como si uno entra por la primera habitación hay una puerta que da al
balcón y conecta con otra habitación de donde podría ver el resto.
Sonó el timbre y salió Ana a abrir y durante un rato estuvieron tocando
el timbre hasta llegar 4 chicos, entonces me dijo que me presentara.
-Hola me llamo Joel-
--¿Qué más?, ¿a qué te dedicas?, ¿edad?, ¿Quién es tu esposa?, ¿Cuánto llevan
juntos?—
-Me llamo Joel, soy diseñador, tengo veintitantos, diana es mi esposa y
llevamos tantos años-
--Justo ahorita Julián acaba de ir a recoger a Diana a su trabajo, como
ya saben chicos hoy se van a coger una putita casada y aquí está su cornudo,
ella no sabe que él está aquí y de hecho él va a estar escondido más que nada
para que no cohíba a la putita, así que disfruten tanto como quieran—
En eso sonó como se abrió el zaguán y me fui a la cocina
-jaja que bobo eres y ¿cuál es la sorpresa?-
Pude ver como mi mujer traía una putifalda negra, con una camisa blanca,
y notaba como traía vendados los ojos, en ese momento una mano sobo su nalga lo
que la hizo moverse por la sorpresa, otra mano en uno de sus pechos y uno de
los chicos que ni tan chico, un señor de unos 40 años se había sacado la verga
de fuera y tomo su mano para que ella se la jalara.
Julián le quito en antifaz y ella pudo ver la orgía que le habían organizado,
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